Viajes

Guía de Shoreditch: el barrio de Londres para los que ya conocen Londres

Repasamos los mejores enclaves de Shoreditch, el barrio mas ‘hip’ de la capital británica
Guía de Shoreditch el barrio de Londres para los que ya conocen Londres
Phil Oh

Comienza la temporada de puentes y escapadas y, con ella, una de las épocas más trepidantes para visitar Londres. Nada como vivir la ebullición de la urbe cargada de monumentos, museos y parques o, en su defecto, dejarse encandilar por el encanto de muchos de los nuevos barrios de moda de la ciudad.

De hecho, precisamente para todos aquellos que acostumbran a viajar o que ya conocen Londres con soltura, explorar algunos de esos barrios aledaños se ha convertido en el reclamo perfecto para regresar a la capital una y otra vez. En este sentido, el barrio de Shoreditch lleva años encumbrado como uno de los centros neurálgicos culturales y gastronómicos de la ciudad y, precisamente por ello, hemos decidido dedicar una exclusiva guía de viaje a esta zona en concreto. Desde sus pequeñas tiendas independientes, a sus incesantes inauguraciones en el plano gastronómico y hotelero, Shoreditch se ha convertido ya en parada obligada de todos aquellos que buscan otro Londres más allá del souvenir y la foto de rigor.

Y por si tú también quieres aprovechar estos meses para explorar todas sus opciones, aquí van nuestras recomendaciones para perderte por sus callejones y rincones de moda. Comenzamos.

Dónde comer en Shoreditch

Manteca

Cortesía de Manteca.
Cortesía de Manteca.
Cortesía de Manteca.

Lo de ir a cenar a un italiano estando en Inglaterra tiene excusa si es en Manteca. El restaurante de moda en la capital (es muy probable que te hayas cruzado con él en el feed de algún prescriptor internacional) es una mezcla entre la tradición de sus platos y el encanto de su decoración. Sus propuestas para compartir son perfectas para maridar con alguno de sus cócteles y sus dos plantas son el emplazamiento ideal para ver y dejarse ver. No dejes de probar su Caccio e Peppe de cangrejo marrón, sus aceitunas fritas (son adictivas) o, por supuesto, su embutido cortado en el momento al modo tradicional.

Lyle's

Cortesía de Lyle's.
Cortesía de Lyle's.

Quien diga eso de que en Londres no se come bien, es que no ha buscado lo suficiente. Lyle’s es una buena muestra de ello. Con un menú que cambia diariamente y una propuesta que actualiza algunos de los platos tradicionales de la cocina inglesa con ingredientes de primera calidad, su carta resulta tan reconfortante como sorprendente.

Pequeños platos que apetecen a cualquier hora con un ambiente refinado pero sin pretensiones son una receta infalible que, seguro, hará que repitas. Y si te sientes con ganas de experimentar, su menú degustación, seguro, saciará tu curiosidad.

Per-Anders Jörgensen 2014

Beigel Bake Brick Lane

Y si hablamos de Shoreditch no podemos olvidarnos de alguno de sus clásicos de parada obligada. Hablamos, claro, de Beigel Bake Brick Lane, un deli de escuela cuyos sándwiches de carne salada son ya toda una institución (aunque no hay que menospreciar los de salmón). Es fácil encontrarse con una cola que da la vuelta a la manzana para hacerse con alguno de sus manjares, pero valdrá la pena la espera. Puro sabor y estómagos llenos por menos de 10 libras.

Cortesía de Beigel Bake Brick Lane.

Jolene

Y otro enclave que se ha convertido ya en un must de la zona es Jolene. Un corner de esta cadena local tan diminuto como lleno de encanto en el que la bollería recién hecha acompaña a sus cafés de especialidad. La cola acostumbra a adornar su entrada y su espacio interior es prácticamente inexistente, pero nada se iguala a disfrutar de su combo de bollo y café al sol en uno de sus banquitos exteriores mientras te sientes en el decorado de una película indie.

Cortesía de Jolene.
Cortesía de Beigel Bake Brick Lane.
Cortesía de Jolene.

Dónde beber en Shoreditch

Tayēr + Elementary

La escena nocturna del barrio es igual de ferviente que la diurna y en ningún sitio podrás hacer la transición de una a otra mejor que en Tayēr + Elementary. Disfruta de alguno de sus tragos delicados (todos se sirven en los mismos vasos y vienen ya mezclados), o consigue pasar a Elementary, su segunda parte solo reservada a amigos de la casa y aquellos que saben esperar su interminable cola. Un truco: sé amable, hazte con la confianza de alguno de los camareros y consigue un pase VIP para esa ‘otra mitad’ en la que los sabores se salen de lo habitual para experimentar con cientos de matices. Además, las buenas noticias pasan porque aquí la mixología se marida con platos igual de cuidados, así que ni siquiera necesitarás cambiar de local para cenar y continuar con la noche. Si te gustan los cócteles, este es tu lugar.

Cortesía de Tayer & Elementary.

Photo Book Café

La zona está plagada de pubs en los que todo tipo de público se da cita para charlar en torno a una pinta, pero si te apetece salirte de lo estrictamente clásico, no dejes de pasarte por Photo Book Café, una esquina en la que no solo podrás coger cualquiera de los libros que la adornan para entretenerte mientras degustas desde un café a una copa, sino que, si tienes suerte, puede que incluso te dés de bruces con una tertulia literaria. Muchos fines de semana cuentan con música en directo y lo cierto es que tanto su terraza como su interior son perfectos a cualquier hora.

Cortesía de Photo Book Café.

Dónde dormir en Shoreditch

Nobu Shoreditch

El emblemático edificio del hotel Nobu de Shoreditch es ya parte inconfundible del barrio, pero más allá de esas cinco plantas diseñadas por el estudio de Ben Adams, desde 2022 (año en el reabrió tras un parón de dos años para mostrar todas sus mejoras) incluye una nueva y estilosa sexta planta en la que se esconde ese lujo silencioso que tanto resuena en los últimos tiempos. Un estilo que encuentra su máxima expresión en su penthouse, diseñado como si se tratase de un loft de los años 70, o en su spa, perfecto para relajarse después de un día de compras con cualquiera de sus tratamientos. Se mire por donde se mire, el hotel es un remanso de paz en medio del bullicio del barrio.

HyperFocal: 0Will Pryce. / Cortesía de Nobu

Y si simplemente quieres disfrutar de una velada agradable, no dejes pasar la oportunidad de deleitarte en la joya de la corona Nobu: su restaurante, situado en el sótano, sirve alguno de los platos icónicos del afamado chef, pero también alguna creación exclusiva de Shoreditch, como su interpretación de la ensalada césar, con un ligero toque de wasabi, gnocchi y trufa.

Cortesía de Nobu.

The Hoxton Shoreditch

Cortesía de The Hoxton.
Cortesía de The Hoxton.
Cortesía de The Hoxton.

Puede que hayas oído hablar de este proyecto hotelero, pero en realidad, este Hoxton no es uno más: se trata del primer hotel de la cadena, que comenzó aquí su andadura en 2006 mucho antes de que East London se convirtiese en ese crisol gentrificado que es hoy.

Construido sobre lo que hasta entonces era un aparcamiento de coches, el espacio reúne el espíritu del barrio como pocos: decoración cuidada, un restaurante Llama Inn para aquellos que busquen experimentar y habitaciones para todos los bolsillos sin renunciar a lo básico. Si te apetece la experiencia hype 100% Shoreditch sin dejarte todos tus ahorros, este hotel acogedor y urbano es la alternativa perfecta para sentirte un auténtico local.

Dónde comprar en Shoreditch

Garmasutra

Cortesía de Garmasutra.

Si por algo es célebre Shoreditch es pos su oferta vintage, con calles tan emblemáticas como Brick Lane, el barrio es el escenario perfecto para perderse entre cazadoras worker customizadas y piezas de coleccionista. Y en el caso de éstas últimas, pocas tiendas se equiparan en oferta y selección a Garmasutra. Una pequeña tienda en Sclater Street que recoge desde jerséis de Missoni a prendas de Jean Paul Gaultier o Burberry. Y si te pasas toda su selección, siempre puedes visitar su patio trasero con descuentos exclusivos. Si entras, no querrás salir.

Bankrupt

Cortesía de Bankrupt.

Y si lo que buscas es una de esas tiendas que aglutina lo mejor de la ropa urbana (a medio camino entre el skate y el lujo) Bankrupt es el sitio perfecto para terminar como su propio nombre indica. Desde Dime, a Butter, pasando por Cash Only o Polar, su oferta resulta tan refrescante como divertida. Es, en otras palabras, la tienda pensada para ellos en la que acabarás comprando tú.

Toast

Cortesía de Toast.
Cortesía de Toast.

Como en todo barrio gentrificado que se precie, también hay cabida para las pequeñas/medianas marcas. Es el caso de Toast, una firma que aglutina lo mejor del concepto cosy, en la que podrás desde darte un capricho con alguno de sus pañuelos, a hacerte con una pieza especial para tu casa. Un rincón con encanto y más de una tentación.

Labour & Wait

Cortesía de Labour & Wait.

Pero como no solo de ropa viven las compras en el extranjero, nada como esta pequeña tienda en la que podrás encontrar desde artilugios para la supervivencia en el campo (todos ellos bellísimos), hasta mantas de pura lana, accesorios para el baño, libros, joyas, jerséis marineros y hasta pañuelos de seda. Una miscelanea tan sorprendente como bien ensamblada.

Vinti Andrews

Cortesía de Vinti Andrews.

Y para terminar, nada como recordar que los diseñadores independientes también encuentran su lugar en Shoreditch, un lugar donde la propuesta de Vinti Andrews es, sin duda, una de las más sorprendentes. Faldas hechas a base de viejos cortavientos o vestidos cargados de color son algunas de las propuestas que podrás encontrar en su interior. Un pequeño rincón en el que reina el upcycling y en el que, haga el tiempo que haga, se iluminará tu día (y tu armario).